Ficha

Una carta fue el inicio de esta historia. Una carta que, seguida de muchas más, vibraron para ponerme en contacto contigo y alentarte a no dejar de vibrar en consonancia con tu corazón y tu alma, pues solamente ellos, saben cuál es la meta a la que has de llegar. Aunque a lo largo de tu camino puedas sentirte sola, incomprendida y perdida, es sólo un sentimiento que bloquea tu mente; ya que, como puedes leer, las historias están llenas de mujeres como tú y, por eso, quiero animarte a que sigas caminando por el sendero que tu corazón te marca pues el sabe, perfectamente, cuál es tu destino. Obviamente no puedo decirte que no llorarás, te derrumbarás y, en ocasiones, todo se volverá oscuro a tu alrededor; sin embargo, deberás seguir adelante porque llegarás a ese claro en el que sentirás paz y tranquilidad. Y, aunque puedas dudarlo en numerosas ocasiones, volverás a reír y a disfrutar de cada pequeño detalle de tu vida y serás consciente de que mereció la pena.